En los próximos años, la forma en que se prescriben materiales en España está a punto de experimentar una transformación profunda, impulsada por dos grandes motores de cambio: la inteligencia artificial (IA) y los biomateriales.

Tradicionalmente, la elección de materiales en arquitectura, ingeniería y construcción ha estado basada en la experiencia técnica, el cumplimiento normativo y los costes. Pero con la irrupción de la IA, ahora contamos con herramientas capaces de analizar miles de variables —desde la huella de carbono hasta el comportamiento térmico o la disponibilidad local— en cuestión de segundos. Esto no solo optimiza decisiones, sino que personaliza las soluciones según cada proyecto, entorno y necesidad.

Por otro lado, los biomateriales —como los bioplásticos, micelio, cáñamo o materiales reciclados de origen orgánico— están dejando de ser una promesa experimental para convertirse en una alternativa real y competitiva. Su combinación con algoritmos inteligentes permite identificar el material más sostenible, funcional y adecuado para cada obra, con criterios científicos y objetivos.

¿El resultado? Prescripciones más precisas, responsables y alineadas con los nuevos marcos de sostenibilidad (como el Pacto Verde Europeo o la taxonomía ESG). La IA nos ayuda a seleccionar con datos. Los biomateriales nos permiten construir con conciencia.

En España, este cambio ya está en marcha. Desde estudios de arquitectura hasta grandes promotoras, cada vez más actores del sector apuestan por plataformas digitales que integran inteligencia artificial para prescribir materiales basados en parámetros de circularidad, salud, eficiencia energética o ciclo de vida.

Estamos ante un nuevo paradigma donde la innovación y la sostenibilidad se dan la mano. Y quienes se sumen ahora, liderarán la transformación del mañana.